Demasiados fines de semana largos...

que se prestan para reunirse con amigos y familia, pero esto trae aparejado que hay que comer, es decir, cuando decimos "-¿vienen a casa mañana?-" la respuesta es: "-¿qué comemos?-" por lo que para nosotros en general reunión con amigos es sinónimo de comida (por no decir comilona).

Por lo tanto siempre hay que pensar también en el postre, que si bien no vivo haciéndolos me gusta de vez en cuando innovar un poco, por lo tanto en el pasado fin de semana largo, donde la idea era conmemorar los 30 años de la guerra con Inglaterra por las islas Malvinas, preparé un rico Tiramisú con cubierta de chocolate en polvo y canela que quedó riquísimo.

Y ahora se viene el otro fin de semana largo, que es el de Semana Santa, que si bien ocuparemos un poco nuestro tiempo libre en cubrir nuestras necesidades espirituales, contribuyendo con nuestra parroquia y sus diferentes actividades, también quedará tiempo libre para las reuniones, comidas y postres, ya veremos con qué puedo sorprender, algo se me ocurrirá.